De curvas laterales, un diseño ergonómico que recuerda al
fracasado Note 7 y, sobre todo, con altas prestaciones. Xiaomi ha desvelado,
por fin, su nuevo teléfono móvil inteligente, el Mi Note 2, un terminal en
formato «phablet» que reúne unas características envidiables.
La firma china ha vuelto por la misma senda que le
caracteriza. Ha creado un cóctel tecnológico cuyos ingredientes son
espectaculares sobre el papel. El terminal, que toma el testigo de la gama Note
de Samsung y cuyo último modelo tuvo que se retirado del mercado a consecuencia
de un fallo masivo en sus baterías, cuenta con una pantalla tecnología OLED de 5.7 pulgadas capaz de
extraer una resolución QHD (2.560 x 1.440 píxeles).
Este nuevo dispositivo móvil, que soporta la tecnología 3D
Touch -que permite discernir la presión ejercida por los dedos para activar
diferentes funciones- cuenta con un diseño muy interesando perfilado por cuatro
curvas en los laterales. Manteniendo un botón físico que ejerce de botón
Inicio, el acabado, muy elegante, mantiene el nivel de anteriores propuestas de
Xiaomi al utilizar elementos «premium».
Donde más llama la atención el Mi Note 2 es sus
especificaciones técnicas. En su interior se agolpa un procesador Snapdragon
821, fabricado por Qualcomm, capaz de moverse a una frecuencia de 2.4 GHz, que
ofrece más potencia que otro tipo de chips a pesar de sacrificar consumo de
recursos. Le acompañan 6 GB de memoria RAM, aunque dispone de una versión de 4
GB, que técnicamente y sin haber tenido ocasión de comprobarlo in situ prometen
un gran rendimiento.
En cuanto a su apartado fotográfico, el Xiaomi Mi Note 2
monta un sensor de 23 megapíxeles (de Sony) para su cámara principal, con
estabilización de imagen óptico y apertura F2.0, mientras que la frontal,
utilizada para videollamadas y hacer «selfies» -autofotos, en español- llega
hasta los 12 megapíxeles. Además, la aplicación cámara incluye un modo especial
para este tipo de imágenes. El terminal chino cuenta con conectivdiad NFC,
puerto USB-C -el nuevo estándar del mercado- y ofrece una memoria interna de 64
y 128 GB de capacidad, aunque ampliable mediante el empleo de una tarjeta
microSD.
Llama especialmente la atención su batería, de 4.070 mAh,
que pueden lograr extender su autonomía por encima de la media del resto de
terminales, aunque este es otro aspecto que habrá que comprobar en el futuro
cuando esté disponible. Además, dispone de un sistema de carga rápida.
Gobernado por el sistema operativo Android 6.0 Marshmallow -la nueva versión es
Android 7.0 Nougat- está diseñado en dos colores (negro y plata). Su precio, al
estilo de Xiaomi, arranca en 380 euros.
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